¿Pueden ser saludables las galletas?

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En el mercado encontramos opciones elaboradas con ingredientes saludables, que resultan una buena alternativa para los momentos en los que nos apetece picar algo dulce.

A los niños les encantan las galletas y, a muchos mayores, también nos apetece picar algo dulce de vez en cuando. Sabemos que no deben jugar un papel protagonista en la dieta, pero no cabe duda de que también pueden tener un hueco en nuestra alimentación.

Para esos momentos en que el cuerpo nos pide un capricho, es importante evitar la tentación de consumir los típicos productos de bollería o galletas que encontramos a montones en las estanterías de los supermercados. La mayoría van cargados de grasas hidrogenadas, colorantes y otros ingredientes muy poco saludables. Para evitarlos, es preferible optar por un dulce elaborado en casa o recurrir a alguna de las opciones que nos ofrecen las marcas que trabajan con ingredientes mucho más sanos.

Ojo con los endulzantes

A la hora de comprar unas galletas, conviene que nos fijemos en los endulzantes empleados en su elaboración. En este sentido, es preferible evitar los que contienen azúcar refinado o edulcorantes artificiales. En cambio, podemos optar por los que emplean azúcar integral de caña, miel o maltas de cereales. Estas últimas resultan una alternativa interesante ya que, aparte de endulzar, nos aportan proteínas y minerales.

La principal característica de las maltas elaboradas con cereales es que se transforman de forma natural. Para obtenerlas, se pone a remojo el cereal y se hace germinar. A continuación, se cosechan los brotes, se trituran y se dejan en agua hasta que fermentan y espesan. De este modo, parte de sus hidratos se transforman en maltosa (compuesta por glucosa). El resultado es un producto con una menor capacidad endulzante que la sacarosa y un aroma característico. Son un buen sustituto del azúcar de mesa y se suelen emplear en la elaboración de galletas, madalenas, panes… Sin embargo, a la hora de consumirlos conviene dar prioridad a las opciones ecológicas, ya que las maltas convencionales pueden contener restos de plaguicidas.

Waffles, dulce tentación

Una buena opción para picar algo dulce y, a la vez, saludable son los waffles de Moleenjarte. Inspirados en la típica receta holandesa, se elaboran con ingredientes procedentes de la agricultura ecológica. Los encontramos en tres variedades diferentes:

Waffles al natural con sirope de maíz Endulzados con sirope de cebada, son ideales para combinar con té, café o bebidas de cereales.

Waffles rellenos de crema de avellanas Endulzados con sirope de maíz, contienen en su interior una suave crema de avellanas. No contienen leche.

Waffles rellenos de miel Sin huevos ni leche, nos aportan energía, calman las ganas de dulce y son perfectos para desayunar o para merendar.

Distribuidos por Qbio, todos ellos se venden en formato de 175 g o en paquetes individuales de 60 g, ideales para llevar en el bolso y picar cuando necesitemos recargar las pilas o nos apetezca una dulce tentación.